"Feedlot-etanol-biogás, ganadería 360"
Editorial del Ing. Agr. Héctor Huergo en Clarín Rural del 1 de octubre de 2016
El feedlot es, sin duda, el mayor salto tecnológico que dio la ganadería argentina en los últimos años. Frente la fuerza de la tradición del engorde pastoril, se trata de una verdadera ruptura paradigmática.
Desde principios del siglo XX, pari passu con los Estados Unidos, en la Argentina hubo intentos de avanzar por la ancha avenida del engorde a corral. El primero fue el de la familia Drabble, en General Villegas. Allí engordaban, en 1910, unos 10.000 novillos alimentados con silo de maíz cortado a machete y transportado en carretones playos, traccionados por caballos, que también lo pisaban. Se repartía con horquillas en comederos de madera.
En los 70, Raúl Rula Firpo, en Canals, alimentaba a corral los míticos toros de La Danesa. El grupo Ferruzzi, en El Socorro, tenía un feedlot bajo techo y con piso de cemento. Abbot Reynal (King Ranch) desarrolló un proyecto en Las Lechiguanas, en 1972, polderizando las islas para aprovechar su extraordinario potencial forrajero.
"La soja ese recurso natural"
Editorial del Ing. Agr. Héctor Huergo en Clarín Rural del 24 de septiembre de 2016
Leo muchos artículos sobre empresas que cotizan en Wall Street y sigo atentamente las opiniones de analistas del mercado de granos. Siempre me llamó la atención que al final de cada nota hay un “disclaimer”, en el que el autor remarca que no tiene ni acciones ni posición tomada en ningún papel involucrado en la nota.
Aclaro entonces yo también: no tengo soja. La última vez que sembré fue en 1975, cuando obtuve el récord zonal de 15 quintales por hectárea con una Clark 63. Ahí en ese mismo campo hoy sacan 45 quintales. Primer corolario: dedicado especialmente al economista Eduardo Levy Yeyati, quien dijo en el imponente Congreso CREA, ante 7.000 fervorosos militantes de la Segunda Revolución de las Pampas, que la Argentina no puede desarrollarse a partir de sus “recursos naturales”.
Por las dudas, la soja no es un “recurso natural”. Ni un yuyo. Es un producto de alta tecnología inteligente. De lo contrario no se hubiera triplicado el rinde en apenas 40 años. Esto no pasa con el petróleo o los minerales. La incidencia del “recurso natural” tiende a cero. Pronto no hará falta ni suelo para producirla.
"Cuando los planetas se alinean"
Editorial del Ing. Agr. Héctor Huergo en Clarín Rural del 17 de septiembre de 2016
Interesante semana para los bionegocios, con un balance muy positivo, a pesar de que siempre nos empeñamos en arruinar el estofado. Repasemos.
El mini Davos fue impresionante. Puso a la Argentina en el centro del tablero global, en un mundo super líquido que busca con avidez adonde invertir. Las tasas de interés son ridículamente bajas, hay excedentes financieros por trillones de dólares. Que por supuesto nunca hubieran venido si no hubiéramos cambiado nuestra postura frente a la comunidad global de negocios.
Bueno, en este foro, la vedette fue la agroindustria. Más allá del panel de reconocidos actores del rubro, como el inefable Gustavo Grobocopatel (Grupo Los Grobo) y Mariano Bosch (Adecoagro), y las presentaciones del equipo ministerial encabezado por Ricardo Buryaile, se destacaron otras presentaciones que atrajeron a los inversores.
Concretamente, el que compartieron el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, y el subsecretario de Recursos Hídricos, Pablo Bereciartúa. Trascendió que aparecieron empresarios planteando el interés por financiar o directamente invertir en riego a gran escala en distintos proyectos. Es uno de los rubros que más viene proponiendo el propio presidente Mauricio Macri. Uno de los interesados quiere desarrollar nodos de producción de biomasa, con riego, para convertirla en generación eléctrica. La bioenergía fue un tema que atravesó todo el foro, como parte sustantiva de las renovables.
"Defender con más energía"
"Editorial del Ing. Agr. Héctor A. Huergo en Clarín Rural del 10 de septiembre de 2016"
Cosecha récord de maíz y soja en los Estados Unidos. Stocks finales que crecen. Precios que ya no son lo que eran. Imaginemos lo que estaría sucediendo si la administración Macri no hubiese eliminado los derechos de exportación y las restricciones al maíz (también al trigo), ni reducido un 15% (del 35 al 30%) las de soja. Una debacle, con efectos sobre toda la economía.
Lo primero que arrancó, tras la asunción del nuevo gobierno, es la industria automotriz, motorizada por las camionetas. Al igual que en 2002: llegó la cosecha gruesa y con ella se activó la demanda de chatas. Hoy es el vehículo más vendido, por todo concepto. Y ya no es la industria petrolera, muy importante mientras duró la quimera del shale. Las inversiones en exploración se derrumbaron y la industria del petróleo se mantiene sobre la base de subsidios con endeble base de sustentación.
También se reactivó la industria de maquinaria agrícola, fuerte demandante de acero, pintura, rulemanes, electrónica. Empresas líderes como Agrometal, al borde del colapso un año atrás, ahora tuvieron que suspender ventas. Están al límite en horas extra. La acción de la compañía, en febrero de 2015 tocó el piso de $1,80. Ahora vale $18,00. Se multiplicó por diez y es la mejor performance en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
"La agroindustria llegó a IDEA"
Editorial del Ing. Agr. Héctor Huergo en Clarín Rural del 2 de septiembre de 2016
Y la agroindustria llegó a IDEA, la institución en la que anida lo más granado del empresariado nacional, y cuyo objetivo es “contribuir al desarrollo productivo y competitivo de las empresas e instituciones para que la Argentina se integre al mundo moderno y desarrollado”. Sucedió el jueves pasado, cuando la filial local celebró el Pre Coloquio 2016 del Instituto para el Desarrollo Empresarial Argentino, bajo el lema “Puentes al Futuro”.
El evento tuvo como eje un jugoso panel de Agronegocios, anticipando desde la filial IDEA Centro (con sede en Rosario, presidida por el entusiasta e hiper activo empresario Julián López) la creación de un área específica en la cincuentenaria institución. Y el propio López informó que en el tradicional Coloquio anual de Mar del Plata, entre el 12 y el 14 de octubre, habrá un fuerte espacio destinado al rubro, con una exposición por parte del CEO de Bioceres, Federico Trucco.
El hecho es tremendamente auspicioso. El mundo empresarial explicitó que también ve al sector agroindustrial como la locomotora de la economía. Ya lo había hecho el gobierno, desde que Mauricio Macri asumió la presidencia. Y lo repite cada semana.
El Pre Coloquio se celebró en la Bolsa de Comercio de Rosario. Buena elección: el auditorio, colmado por cientos de asistentes del mundo empresarial, está pegado al pit en el que los agentes del mercado transaban (a la vista de todos y separados por un vidrio) miles de toneladas de soja, maíz, trigo, con las pizarras mostrando en tiempo real las cotizaciones locales y las del Chicago Mercantile Exchange. Porque en esto, la Argentina está online. Y gracias a esto, la Argentina respira.