El Día de la Independencia…Energética
El Editorial de Héctor Huergo del 13 de julio en Clarín Rural
El pan fue la vedette mediática de la semana, con tantos decibeles que hicieron pasar a segundo plano otras cuestiones quizá más trascendentes. Porque de una manera u otra el trigo va a llegar, y al menos ahora tienen un precio para dibujar el índice. Habrá una inflación hasta las 10 de la mañana y otra a partir de esa hora.
Entre las cuestiones trascendentes, se cuentan los anuncios formulados por la Presidenta en Tucumán, el 9 de Julio, celebrando el Día de la Independencia. Cándidamente, Cristina Kirchner “puso en marcha” el plan alconafta. Argumentó que lo hacía para “agregar valor al azúcar”, dado que alguna mano negra nos maneja el precio desde afuera. Los hizo bajar y entonces hay que transformarla en alcohol para combustible.
El gobierno no quiere trigo
Definitivamente, el gobierno no quiere trigo. El ultimátum que lanzó esta semana el secretario de Comercio, amenazando con aplicar la ley de abastecimiento, tendrá sus consecuencias en el corto y en el largo plazo.
En el corto plazo, es probable que los que todavía guardaban algún bolsón, ahora lo abran. El miedo no es zonzo. El mercado dio una indicación al respecto, ya que el precio bajó en unas horas de 490 dólares la tonelada, a 410. Apareció algo de oferta. Ahora, ya no cuesta el doble que en Chicago, sino apenas un 70% más.
Y sin embargo, se mueve…
Podríamos abundar más en la saga del Experimento K y sus dislates, con el caso emblemático del trigo, su escasez y la abrupta disparada de los precios. La alquimia no lo puede todo, y seguramente los esfuerzos de esta semana para fabricar oferta interna sin importación solo estirarán la agonía algunas otras semanas. Rascando el fondo de la olla, se acordó que los exportadores volcarán al mercado otras casi 200.000 toneladas listas para embarcar. En tiempos normales, se necesitan 100.000 por semana. Veremos en el día a día si el mercado se tranquiliza.
AgroKing construye una nueva planta industrial.
AgroKing anunció la construcción de una nueva planta industrial, para la fabricación de barrales de fibra de carbono para pulverizadoras, y otras piezas para el mercado agrícola.
La planta se levantará en el Parque Industrial Campana, en la provincia de Buenos Aires, con una inversión de 12 millones de pesos. El emprendimiento se realiza con capital propio de los accionistas, más el aporte de un Crédito del Bicentenario.
La empresa, que lanzó sus primeros productos en el año 2011, experimentó un vigoroso desarrollo a partir de la aceptación por el mercado de sus barrales ultralivianos, realizados en fibra de carbono.
El producto ya fue adoptado por dos empresas líderes del sector: Caimán y Pla, y varias compañías globales han adquirido equipos para ensayarlos sobre sus propias pulverizadoras. Pla presentará en el próximo Farm Progress Show una máquina equipada con un barral AgroKing de 36 metros.
El sistema también fue incorporado por varios productores argentinos, que incrementaron la capacidad de trabajo de sus pulverizadoras automotrices gracias al aumento de más de 50% del ancho de labor. Además de la mayor capacidad de trabajo, se reducen costos por menos pisada del cultivo y menor consumo de combustible.
Después de consolidar el desarrollo de su barral de 36 metros, AgroKing lanzó uno de 45 metros, AgroKing lanzó uno de 45 metros que permite trabajar a 30km/h; el mayor ancho del mundo para esa velocidad de trabajo. Un productor líder del oeste de la región pampeana lo aplicó sobre una pulverizadora John Deere que ya había experimentado exitosamente la de 36 m. Está en plena campaña de barbechos.
El objetivo de AgroKing es abastecer al mercado agrícola con más productos que puedan aprovechar las ventajas de estos nuevos materiales. Tal es el caso de cuadros basculantes de pulverizadoras, tubos de descarga y otras piezas sometidas a esfuerzos extremos.
La nueva fábrica estará capacitada para un fluido abastecimiento de una demanda de rápido desarrollo.
Acerca de AgroKing
Agro King es la división especializada en aplicaciones agrícolas de King Harken, una empresa dedicada desde hace treinta años al desarrollo y la producción de elementos de alta performance para la náutica y aplicaciones especiales. Es líder mundial en la utilización de materiales compuestos ("composite"), que combinan prestaciones superiores a los convencionales, pero con mucho menor peso.